Por el municipio de A Pobra do Caramiñal transcurre esta ruta de senderismo. Seguiremos el cauce del río Pedras hasta su nacimiento en el monte de A Curota, pasando por las piscinas naturales, un antiguo convento abandonado, la cascada de A Miserela, y alcanzaremos la Sierra del Barbanza, desde donde gozaremos de magníficas vistas a la ría de Arousa.
Localización
Iniciamos la ruta en A Pobra do Caramiñal, población situada al sur de la provincia de A Coruña, en el borde norte de la Ría de Arousa. Estamos en las Rías Baixas, donde el Monte da Curota constituye uno de los mejores miradores hacia las rías.
Descripción de la ruta por el río Pedras
Iniciamos la ruta en Aldeavella, donde finaliza la carretera asfaltada que parte de A Pobra do Caramiñal. Las casas abandonadas de Aldea Vella se emplazan a orillas del río Pedras, en un entorno frondoso. El estrecho sendero sigue la orilla del río, pasando por viejos molinos abandonados.
Ruinas de Aldeavella
Un poco más adelante pasamos por la antigua “Fábrica de Luz”, una pequeña central hidroeléctrica.
Este tramo coincide con la antigua ruta de senderismo PRG-91, ahora mal mantenida y mal señalizada. Las mejores señalizaciones pertenecen a las rutas municipales de A Pobra, R01 y R02.
Fábrica de Luz
El sendero continúa cercano al río, y así alcanzamos las piscinas naturales del Río Pedras, unas pozas que forma el río, muy placenteras para un baño en verano.
Piscinas naturales del Río Pedras en A Curota
Continuando la ruta llegamos al antiguo puente de piedra. En este punto, se unen dos ríos que descienden de A Curota, el río Barbanza y el río San Xoán, para formar el río Pedrás, que desembocará en A Pobra. Próximo a este lugar se sitúan los restos del antiguo convento franciscano de A Miserela, datado en el siglo XIV. No quedan más que los cimientos y algunos canales de agua, perdidos entre la maleza.
Continuando el ascenso a lo largo del río San Xoán nos topamos con la Cascada de A Miserela, que resbala por una pared de piedra. Otro lugar apetecible para un baño, más solitario en este caso, dada la mayor dificultad de acceso.
Río San Xoán
Cascada A Miserela
A partir de entonces la subida se vuelve más peliaguda. El terreno es muy escarpado, y el río se ve obligado a precipitarse por los pendientes desniveles. Nuestros pasos avanzan lentamente, y de vez en cuando nos detenemos a contemplar el paisaje que queda a nuestras espaldas. Las vistas hacia la ría de Arousa se abren cada vez más, mientras que a nuestro alrededor todo se muestra florido en amarillo.
Subiendo a A Curota
Tras el esfuerzo de la subida alcanzamos las praderas casi llanas de la cima del Barbanza, en el lugar de O Castelo. Los riachuelos fluyen más calmados. Los caballos habitan en libertad. Estamos en el Monte A Curota. El sendero continua a orillas del río hasta que finalmente nos alejamos del agua. Entre praderas y pinares nos encontramos el curro donde se realiza la Rapa das Bestas.
Curro Rapa das Bestas en A Curota
Caballos salvajes en A Curota
Río en A Curota
Desembocamos en pistas forestales, por las cuales realizamos el descenso. Las vistas son magníficas. De frente no perdemos de vista la Ría de Arousa. Divisamos la isla de Arousa, Sálvora, Ons, y las Islas Cíes. Las costa de Arousa norte y Arousa sur se presenta ante nuestra vista. A nuestra derecha queda el Cañón del río Barbanza, un terreno escarpado que se levanta con una verticalidad bastante respetable.
Cañón del río Barbanza
Vistas de la Ría de Arousa desde A Curota
Tras descender, llegamos finalmente a la aldea de Posmarcos. Aquí podríamos habernos desviado para visitar los sarcófagos antropomorfos de Pomar, excavados en la roca. Pero seguimos adelante para dar por finalizada la ruta en Aldeavella.
Track de la ruta por el río Pedras