La isla de Santo Antao atesora lugares tan bonitos como la Ribeira da Torre. Las montañas acordonan un valle verde labrado en terrazas agrícolas, en el que se desparraman aisladas casas que arrastran una vida del pasado. Es el escenario de esta ruta que recorre caminos enlosados, partiendo de la aldea de Xoxo hasta alcanzar Agua das Caldeiras.
Nos levantamos sin haber planificado nada, pero, como siempre, nos dejamos aconsejar, y nos decantamos por el sendero de Ribeira da Torre. Dado el alto desnivel de la ruta, es más habitual realizarla en descenso. Para ello, desde el valle de Paul podríamos subir caminando hasta el Cráter da Cova y después bajar por la Ribeira da Torre hasta Xoxo, para después regresar en coche. Pero al consultarlo con nuestras rodillas, desistimos de tan castigadora bajada durante 4 horas. Así que, preferimos afrontar la paliza de subirla. Son apenas 6 Km de ascenso, pero tan vertical, escalón a escalón, que deja las piernas finas. 1300 m de desnivel!
Localización. Cómo llegar a Xoxo
Xoxo se ubica en un valle interior de Santo Antao, al que se accede desde la localidad costera de Ribeira Grande, situada al norte de la isla.
Para llegar hasta Xoxo en transporte público desde el Valle de Paul necesitamos hacer varios transbordos. Primero un aluguer colectivo nos lleva a Cidade das Pombas. Ahí hay siempre varios vehículos esperando. Únicamente se acercaron a preguntar nuestro destino y nos dirigieron al vehículo correspondiente para ir a Ribeira Grande. Este es un trayecto costero donde la carretera serpentea entre áridos acantilados. Creo que tardamos unos 15 minutos.
Trasladarse de Ribeira Grande a Xoxo ya no es tan fácil. Casi nadie va hasta allí y no parecía fácil encontrar un aluguer, por lo que pedimos al mismo conductor que nos llevara como taxi (800 CVE).
Sorprendidos estábamos al ver la buena carretera hasta Xoxo, con asfalto nuevo en perfecto estado, nada habitual en Santo Antao.
Descripción de la ruta
Xoxo es una pequeña aldea inmersa en la Ribeira da Torre, justo donde el paisaje empieza a reverdecer alejándose de la costa. La calma es total. El valle estrecho queda encerrado entre paredes montañosas y a aquella de enfrente es a la que nos dirigimos. Nos llama la atención un pináculo rocoso que alza su silueta sobre Xoxo. Menudo día ha amanecido, tan soleado. Está claro que hoy el sol pretende castigar duro.
Nuestra caminata no va a ver interrumpida la subida desde los 170 m de altura de Xoxo hasta lo alto de la montaña. Avanzamos por el camino tradicional empedrado, construido a mano por sus habitantes para llegar a pie a las casas que se desperdigan por las laderas. Unos tramos son escaleras, otros son pendientes brutales. La tierra es fértil y generosa. El agua también, y fluye por los canales. Todo el paisaje es una auténtica obra de ingeniería hidráulica y agrícola. Resulta inverosímil la verticalidad por la que trepan las terrazas de cultivo. No, no puede ser que esas brutales pendientes estén cultivadas por el hombre, agarradas con descaro a los riscos rocosos.
Plataneras, papayos, ñame, caña de azúcar rodean a las cabañas de techo de paja, viviendas típicas del interior de Santo Antao. Las crestas de las montañas forman una corona que esconde el valle del mundo exterior, como queriendo encerrar un secreto.
A 600 m de altura alcanzamos Rabo Curto. Todo este trayecto ha sido una cadena de saludos, de cruzarnos con los campesinos del lugar que portan una eterna sonrisa dibujada en sus rostros. No hay prisa. Esto es África. Lo que sí hay son muchas ganas de conversar. Se nota que es gente de campo. Nos abordan para hablar e incluso nos invitan a sentarnos, parecen deseosos de ver caras nuevas. Y es que me he dado cuenta que el entretenimiento favorito de los caboverdianos es sentarse a esperar que pase el tiempo.
En Rabo Curto hay 3 pequeñas tiendas (mercearias que llaman ellos). En una compramos agua y en otra plátanos, aunque en realidad no eran producto en venta, pero en un alarde de visión de negocio, la mujer se agenció con ellos en un plisplás.
Todavía queda mucho por subir y el sol cae vertical. Entre bancales de cultivo nos alejamos del valle. Los pueblecitos quedan cada vez más abajo. Cuando el terreno es más pedregoso, desaparecen las plantaciones tropicales. Son los aloes los únicos que se atreven a crecer entre las rocas.
Sobrepasados los 1000 m de altura, las vistas son más alucinantes todavía. Ya no sólo divisamos el Valle de Ribeira da Torre. Ahora también el Valle de Paul aparece tras las montañas. Y al fondo, el mar. Miras para arriba y no te crees que se pueda subir por ese abismo vertical. Pues sí, se puede. Y además por un camino empedrado en miles de zigzags. Es impresionante porque las montañas se alzan arrogantes 1500 m por encima del valle.
Finalmente alcanzamos la cima en Agua das Caldeiras, a 1470 m de altura, poblada por pinos y mimosas. Qué gusto caminar por el mullido suelo del pinar. Otro regalo nos espera cuando el sendero nos conduce al Cráter da Cova. Volvemos a ver el mosaico de parcelas que ocupan el fondo de la caldera volcánica. Y al fondo, distinguimos las siluetas de Sao Vicente y Sao Nicolau, perfectamente nítidas en el horizonte.
Queremos continuar unos metros más por la carretera interior de la isla para llegar al restaurante de un italiano, el Biosfera Amor do Día. Nos tomamos una cachupa que sabe a gloria con vistas a Porto Novo y a la isla de Sao Vicente mientras Enzio nos consigue un taxi para Ribeira Grande.
En coche por la carretera de montaña de Santo Antao
Recorrer la carretera adoquinada del interior de la isla de Santo Antao entre Cova y Ribeira Grande es un espectáculo para la vista. Cada poco paramos para contemplar lo que parece increíble, profundísimos valles cultivados en terrazas a cada lado de la carretera. Un paisaje repleto de montañas, salvaje y a la vez colonizado por el ingenio de los humanos.
Paseo por Ribeira Grande y aluguer a Vila das Pombas para enlazar con otro aluguer a Casa Cavoquinho. Será nuestra última noche en el Valle de Paul. Mañana nos vamos a la costa.
En Casa Cavoquinho nos agasajan con otra espléndida cena. Humus, sopa de patata, carne con cuscús y zanahorias fritas, mus de chocolate.
Fotos de la ruta Ribeira da Torre
Aldea de Xoxo
Escuela de Xoxo
Descansando en Xoxo
Terrazas agrícolas en Xoxo
Ribeira da Torre
Aldea de Rabo Curto en Ribeira da Torre
Vistas de Ribeira da Torre en Santo Antao
Montañas que separan Ribeira da Torre del Valle de Paul
Ribeira da Torre desde lo alto……Impresionante!!
Llegando al bosque de Agua das Caldeiras
Cráter da Cova
Vista de la Isla de Sao Vicente desde Biosfera Amor do Día
Fotos de la carretera de montaña de Santo Antao de Corda a Ribeira Grande
Casas en Corda
Vistas desde la carretera de Corda
Vistas de la Serra da Garça
Vista de la Ribeira da Torre desde la carretera de Corda
Vistas de la Serra da Garça
Carretera de Corda. Ahí se estrecha la montaña y la carretera cuelga de precipicio a ambos lados
Casas en Ribeira Grande
Track de la ruta
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/cabo-verde-santo-antao-xoxo-agua-das-caldeiras-23572450
ESTA ETAPA PERTENECE AL VIAJE: Cabo Verde. Senderismo y música