Ruta al Volcán Mocho Choshuenco CHILE: REGIÓN DE LOS RIOS 2


En esta excursión a la Reserva Nacional Mocho Chosuenco tenemos ocasión de contemplar el espléndido panorama compuesto por el Volcán Mocho Choshuenco, extensiones de bosque valdiviano, numerosas montañas y varios lagos. Accedemos tras pasar la localidad de Choshuenco en el lago Panguipulli y nos detenemos en diversos miradores para contemplar el volcán.

Reserva Nacional Mocho Choshuenco

Cómo llegar al Volcán Mocho Choshuenco

Choshuenco llegamos en pocos minutos desde Neltume por carretera asfaltada. El pequeño pueblo asentado a orillas del lago Panguipulli todavía dormitaba a esas horas mañaneras de domingo. Apenas un grupillo de jubilados departía en la playa. Contemplaban el viejo barco de vapor que antiguamente transportaba madera por el lago, antes de construir la carretera que lo bordea. Y es que Choshuenco nació como puerto maderero. Estamos en la Región de los Ríos.

Lago Panguipulli en Choshuenco

Unos kilómetros hacia el sur se emplaza el lago Riñihue. Ambos lagos están conectados por el río Enco. El Lago Riñihue es el más occidental de los 7 lagos, el más alejado de la Cordillera, y por eso recoge las aguas de todos, aguas que finalmente desembocan al mar en Valdivia. El río San Pedro es el desagüe del Lago Riñihue, aunque en Valdivia se convierte en el río Calle Calle.

Río Blanco, afluente del río Enco en la falda del volcán Mocho Choshuenco

La pista de ripio que transita paralela al río Enco hacia el lago Riñihue es la que tomamos para alcanzar nuestro objetivo, el Volcán Mocho Choshuenco. El ripio es algo peor en la pista que asciende el faldeo del volcán, aunque con cierta pericia logramos superar todas las curvas con nuestro Peugeot 2008. Los bosques de altísimos abetos nos fuerzan a mirar hacia arriba para creernos su elevadísima altura.

Desaparecen las coníferas en cuanto ascendemos un poco, para dejar paso a especies nativas. Las lengas y los ñires brillan al sol. El lago Riñihue hace acto de presencia en el panorama que divisamos. Su costa es abrupta y no existe carretera, ni siquiera ripiada, para bordearlo por completo, sólo algunos tramos.

Lago Riñihue

Miradores en la Reserva Nacional Mocho Choshuenco

En la pista de subida al volcán, a algo más de 1000 m de altura, nos detenemos en un par de miradores de reciente construcción: Mirador Los Volcanes y otro mirador cuyo nombre no recuerdo. En un día tan despejado, el paisaje luce sus mejores galas. Los dos conos del volcán Mocho Choshuenco (de unos 2400 m de altura) muestran sus cimas heladas por encima de la línea de bosque valdiviano. Es fácilmente reconocible la figura achatada del cono Mocho mientras que su compañero, el cono Choshuenco, exhibe una figura más puntiaguada.

Cono Mocho

Cono Choshuenco

Reserva Nacional Mocho Choshuenco. Mirador Los Volcanes

Volcán Mocho Choshuenco y río Blanco

Desde los miradores descendemos al valle del río Blanco, donde se ubican las instalaciones del Club Andino que parecen abandonadas. A partir de entonces no podemos continuar con nuestro vehículo. La pista sigue 4 km más, pero ya sólo es apta para 4×4. Nuestra intención, al igual que la de 3 chilenos con los que coincidimos, era acercarnos al volcán todo lo posible, y a falta de indicaciones, echamos a caminar por la pista.

Se me estaba haciendo pesado el camino cuando nos encontramos al guardaparques de Conaf. Por fortuna, nos invita a llevarnos en su camioneta hasta el Mirador Tumba del Buey. Lástima que ya casi habíamos llegado a pie. Como el estado del último tramo es tan malo, él sube y baja continuamente en 4×4 para ofrecer transporte a los escasos excursionistas que rondan por aquí. Intentan promocionar turísticamente la Reserva y se prevé construir un refugio de Conaf y un camping. Están abriendo un sendero, el cual después utilizamos para bajar, aunque todavía no está señalizado ni totalmente limpio. De momento apenas reciben visitantes.

Era encantador el guardaparques de esta Reserva de Conaf. Nos explicó que el cráter hundido que vemos en la falda del volcán se originó durante la erupción de 1856. Como históricamente estalla cada 150 años, ya le va tocando…….esperemos que no lo haga hoy. Se prevé que la próxima erupción será muy explosiva y podría afectar gravemente a las poblaciones vecinas. Nos contó también que en 2016 acondicionaron la pista para facilitar el acceso a la Reserva, y construyeron varios miradores. Nos explicó también que para los pueblos huilliche, habitan espíritus en estas montañas volcánicas.

Mirador Tumba del Buey: Lago Panguipulli

Mirador Tumba del Buey. Vista del Cráter colapsado

Desde el Mirador Tumba del Buey se puede subir un poco más en 4×4. Se ofreció a llevarnos en su camioneta el responsable de una estación meteorológica situada en el volcán. En el punto donde finaliza la pista existe otro nuevo mirador con plataforma que nos aporta unas vistas más cercanas a los volcanes y más amplias hacia los lagos, bosques y montañas que divisamos a lo lejos. Obtenemos una buena perspectiva de los Lagos Panguipulli y Riñahue, cuyas aguas descansan entre montañas forradas de bosque valdiviano.

Volcán Mocho

Todavía no me parecían lo bastante elevadas las vistas, por lo que decido continuar por el sendero que asciende al volcán. No pensaba llegar al cráter, ya que requeriría equipamiento especial para nieve y para rescate en caso de caída en alguna grieta del glaciar. Al alcanzar la nieve, a algo más de 1600 m de altura, las vistas son excelentes. Además de todo el paisaje anterior, también asoma el lago Ranco al fondo de una quebrada. No es un paisaje cordillerano en sí, pero es muy bonito. Hay volcanes, campos de cenizas volcánicas, bosques, lagos, montañas.

Volcán Mocho Choshuenco. Vista del cráter colapsado

Reserva Nacional Mocho Choshuenco. Vista del lago Panguipulli

Reserva Nacional Mocho Choshuenco. Vista del lago Ranco

Volcán Mocho Choshuenco. Vista de los lagos Panquipulli (derecha) y Riñihue (izquierda)

Reserva Nacional Mocho Choshuenco. Vista del cono Choshuenco

Reserva Nacional Mocho Choshuenco. Vista del Mirador Tumba del Buey

Vista desde Mirador Tumba del Buey: Lago Panguipulli

Descendemos por el sendero que nos había indicado el guardaparques, mucho más sombrío y bonito que la pista, aunque todavía sin señalizar, haciéndonos despistar de la dirección correcta y desembocamos de nuevo en la pista. Creo que lo han bautizado como el sendero del puma, aunque no lo recuerdo exactamente.

Sendero de la Reserva Nacional Mocho Choshuenco

Información de CONAF Reserva Nacional Mocho Choshuenco:

 http://www.conaf.cl/parques/reserva-nacional-mocho-choshuenco/

 

Lago Panguipulli

En coche regresamos al pueblo de Choshuenco, donde la playa estaba animada, para después bordear el Lago Panguipulli. En esta carretera asfaltada hay varios miradores con espléndidas vistas al lago, más fácilmente accesibles cuando se viene en sentido contrario, de Panguipulli a Choshuenco. Sin duda, el lago Panguipulli es uno de los más escénicos de la Región de los Ríos, especialmente cuando tienes ante tus ojos el Mocho Choshuenco sobresaliendo por encima de sus aguas.

Lago Panguipulli desde la carretera entre Choshuenco y Panguipulli

Pensábamos quedarnos a dormir en la localidad de Panguipulli, pero nos tentaba la idea de llegar a Frutillar, que tanto nos había gustado hace unos años. Nos acordábamos mucho de las bonitas imágenes de los volcanes emergiendo sobre el lago Llanquihue, y también de los kuchen tan deliciosos que sirven en Duendes del Lago.

Lago Panguipulli desde Panguipulli

Rápidamente busqué un alojamiento en internet y llamé por teléfono para reservar. Llegaríamos con el tiempo justo para salir a cenar. Mientras tanto, nos dirigimos por carretera a la población de Los Lagos, para tomar la autopista hasta Frutillar. Es una autopista peculiar. Te puedes tropezar con peatones que cruzan la autopista, ciclistas, o incluso gallinas. Así volvemos a cambiar de región en Chile, de la Región de los Ríos, a la Región de los Lagos, aunque volveremos dentro de unos días para conocer la costa de Valdivia.

Frutillar (Lago Llanquihue)

La llegada a Frutillar resulta triunfal. Esa hilera de volcanes sobre el lago Llanquihue que no pudimos apreciar hace unos años, se dibuja ahora esplendorosaEl volcán Puntiagudo, el Osorno, el Tronador, el Calbuco, teñidos de rosado al atardecer hacen que nos abracemos con una sonrisa.

Vista de los volcanes Puntiagudo, Osorno y Tronador

Lago Llanquihué desde Frutillar: vista del volcán Calbuco

Lago Llanquihué desde Frutillar al atardecer

Dónde dormir y cenar en Frutillar

Hotel Terrasur en Frutillar. Habitaciones amplias y camas cómodas, algunas con vistas al lago. Frutillar está lleno de unas aves que chillan un montón y nos han despertado. Desayuno: pan caliente, mantequilla o aceite, jugo de fresa, huevos, queso, jamón cocido, café con leche, tarta de uvas.

Cena en el restaurante del hotel (D’Eleitte). Cenamos unas ensaladas bastante completas para dejar sitio a los kuchen que finalmente tomamos en Gutten Apetite, ya que Duendes del Lago acababa de cerrar.

Todavía se bañaban varios muchachos en el lago Llanquihue por la noche. Y es que, menudo calor está haciendo, 30 ºC en  noviembre!!. Hemos sudado de lo lindo.

 

Track de la ruta Volcán Mocho Choshuenco

https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/chile-reserva-volcanes-mocho-y-choshuenco-34885509

 

ESTA ETAPA PERTENECE AL VIAJE:  CHILE. UN VIAJE ENTRE VOLCANES: NORTE, ARAUCANÍA Y CHILOÉ

 


Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

2 ideas sobre “Ruta al Volcán Mocho Choshuenco