Los elefantes son muy familiares y protegen a sus crías con máximo cuidado. Resulta entretenido verlos cruzar un río, en fila india, siempre protegiendo a los pequeños, abriendo y cerrando fila un adulto.
Pero, mejor que no se enfaden contigo, porque pueden resultar muy agresivos. No les gusta ver invadido su espacio ni su sentido de marcha.
En Kruger, muchos coches no respetan la recomendación de mantener una distancia de seguridad mínima de 60 metros con un elefante, y nunca interponerse en su dirección de marcha. Veíamos como algunos vehículos pasaban instantes de apuro. Los elefantes te avisan, primero mueven las orejas, después el rabo, pero en cuanto los cabreas, van a por tí.
Cómo entender el «lenguaje corporal» de los elefantes. Algunas recomendaciones:
- Mantener una distancia de seguridad mínima de 60 m.
- Cuidado con sus movimientos, se mueven rápidamente y silenciosamente.
- No hagas ruido, ni grites, permanece constantemente alerta.
- No entres en pánico
- No salgas del coche, ni te asomes por la ventanilla
- Los elefantes se extienden cuando están comiendo. Cuando veas uno, habrá más alrededor, búscalos y entérate dónde están los demás. No te metas entre ellos o bloquees su dirección de movimiento.
- Si los has pasado conduciendo y los ves a menos de 60 m en el bosque, no pares. Mantente conduciendo al mismo ritmo hasta que hayas restablecido los 60 m de distancia.
- No persigas elefantes. El acoso los irrita y pueden reaccionar con cabreo.
- Observa su lenguaje corporal. Si dejan de comer, se giran sobre sus talones, mueven el rabo, agitan sus orejas, etc. son signos de cabreo. Vete y déjalos en paz!
- No lleves fruta (especialmente mango) en el coche.
Los elefantes son muy inteligentes y acumulan conocimiento, construyendo «comportamiento aprendido». Sus experiencias de hoy les afectarán mañana. La única solución a un constante mal comportamiento de un elefante es su destrucción. Tu comportamiento responsable ayudará a prevenir esto.