Las Siete Villas del Alto Najerilla en La Rioja están unidas por su historia trashumante, que propició su desarrollo económico. Se trata de Brieva de Cameros, Ventrosa, Viniegra de Abajo, Viniegra de Arriba, Mansilla de la Sierra, Villavelayo y Canales de la Sierra, un conjunto de pueblos de piedra en la Sierra de la Demanda que recorremos en este itinerario en coche.
Las Siete Villas del Alto Najerilla
Estos siete pueblos fundaron en 1584 una confederación para ordenar sus actividades ganaderas, como el reparto de pastos y los pasos trashumantes.
El párroco mayor presidía las reuniones de los alcaldes de las siete villas, que tenían lugar en la Casa de la Isla ubicada en Mansilla de la Sierra. Su economía basada en el ganado ovino favoreció la creación de industrias textiles de lana en esta comarca del Alto Najerilla, actividad que inició su declive a finales del siglo XIX, ocasionando la emigración de muchos de sus habitantes.
Iniciamos el recorrido en coche por las Siete Villas del Alto Najerilla accediendo desde Neila en la provincia de Burgos. De Neila a Villovelayo, la carretera serpentea por el escarpado y angosto desfiladero del río Neila. En otoño es posible apreciar un gran surtido de colores, ya que diversas especies vegetales se entremezclan en los escarpes rocosos.
Desfiladero del río Neila
Villamelayo
El pueblo de Vilamelayo es una locura cromática otoñal, envuelto en distintos tipos de árboles que recubren las faldas de la Sierra de la Demanda.
Las casas de piedra se alzan sobre los ríos Neila y Canales, que forman el Najerilla. La Plaza Mayor es el punto de encuentro de calles empedradas. En la parte alta se erige la Iglesia de Santa María, cuya estructura románica posee restos visigóticos y mozárabes.
Los paseos a orillas de los dos ríos que confluyen en el pueblo entre frondosa vegetación, sus calles empedradas, sus puentes de piedra, sus casas de arquitectura tradicional, todo el conjunto es un himno a la tranquilidad.
Después de su floreciente pasado dedicado a la ganadería ovina e industria lanar, su población ha ido mermando y ahora apenas posee unos 100 habitantes.
Más información de Villavelayo: http://www.villavelayo.org/
Villavelayo, una de las Siete Villas del Alto Najerilla en La Rioja
Iglesia de Santa María en Villavelayo
Canales de la Sierra
Si Villavelayo queda recogido en el desfiladero, su vecino Canales de la Sierra (a 4 Km) se emplaza en una posición más abierta y soleada. Es un pueblo más grande y animado.
Se ubica a ambas orillas del río Canales (que formará el Najerilla) y dispone de un agradable paseo de ribera.
Sus grandes casonas de piedra restauradas, algunas blasonadas, denotan un pasado de bonanza económica. El Palacio Condestable es un buen ejemplo de arquitectura nobiliaria.
La minería jugó un papel relevante y en homenaje han puesto una vagoneta minera con sus raíles en una calle.
También el teatro ha formado parte de sus vidas. Es el más antiguo de La Rioja y todavía sigue activo, con programaciones que atraen a numerosos visitantes. El edificio que lo alberga ocupa una antigua iglesia. En la torre podemos ver la figura del papamoscas junto al reloj. El interior del teatro barroco del siglo XVIII se estructura en una corrala y se considera muy singular. Fue construido por una familia local que se enriqueció vendiendo lana merina a los flamencos.
La iglesia de San Cristóbal, es una joya del románico riojano. Se alza en la parte alta del pueblo y data del siglo XII. Su galería porticada es una maravilla, con techo de madera, arcos románicos, capiteles tallados. Es un espléndido balcón a la sierra, la cual exhibe el colorido de los árboles.
Desde la iglesia románica contemplamos la Iglesia de Santa María, del siglo XVI-XVII, que se sitúa en un extremo del pueblo.
Más información: http://www.vallenajerilla.com/pueblos/canales/canales.htm
Teatro de Canales de la Sierra
Iglesia de San Cristóbal, románico riojano en Canales de la Sierra
Canales de la Sierra en el Alto Najerilla
Mansilla de la Sierra
Siguiendo la carretera que recorre el valle del río Najerilla nos encontramos el Embalse de Mansilla, que vemos con un nivel preocupantemente bajo. La presa se construyó a mediados del siglo XX y causó el anegamiento del pueblo de Mansilla, que en aquellos momentos contaba con unos cuantos centenares de habitantes. Casas y huertos quedaron bajo las aguas para desesperación de sus habitantes.
Sólo una edificación se salvó, la pequeña ermita de Santa Catalina, emplazada en una situación más elevada de la que alcanzaría el agua. Todavía se conserva la ermita, y su entorno se ha convertido en área recreativa, aunque la encontramos cerrada por reparación.
Los restos del antiguo pueblo se pueden apreciar cuando el nivel del agua está bajo, y así podemos distinguir las ruinas de la antigua iglesia, cuyos muros parecen flotar en el agua. Otro edificio destacado se conocía como “El Palacio”, una gran casona. El paisaje es bonito, con las laderas arboladas sobre el embalse.
El nuevo pueblo se ha trasladado a un lugar superior. Al tratarse de un pueblo nuevo, no mantiene su arquitectura tradicional, ya que las blancas fachadas nada tienen que ver con las casas de piedra que existen en las demás Siete Villas.
En Mansilla se ubicaba la Casa de Islas, lugar en el que se reunía la confederación de las Siete Villas. Su emplazamiento se eligió por ser lugar de paso en las rutas de la trashumancia. Se enclavaba entre los ríos Portilla y Urbión. Con la construcción del embalse, la Casa quedó sumergida.
Más información: http://www.mansilla.org/
Embalse de Mansilla
Venta Goyo
Después del embalse de Mansilla recorremos unos kilómetros de paisaje precioso. El desfiladero del río Najerilla se escarpa, las laderas se aprietan y los árboles y arbustos que recubren las laderas se pintan de colores otoñales. Gozando de estos bonitos paisajes llegamos a la Venta de Goyo, buen lugar para alojarse o comer en esta ruta por las Siete Villas del Alto Najerilla.
En Venta de Goyo se bifurca la carretera, una se dirige a Brieva de Cameros, otra de las Siete Villas del Alto Najerilla, que no tuvimos ocasión de visitar porque nos quedaba a desmano. Nosotros seguimos por la otra carretera a Ventrosa de la Sierra.
Ventrosa de la Sierra
Una estrechísima carretera de montaña se describe por abruptos desfiladeros. Cruzamos el río Urbión antes de llegar a Ventrosa, donde se acaba la carretera a 1000 m de altura en el valle del río Ventrosa. El Puente de Hiedra compone un bucólico lugar, situado sobre el río Najerilla en la carretera que va de Venta Goyo a Nájera.
Me esperaba encontrar un pueblo muerto, lleno de gente mayor y bastante destartalado, ya que está apartado de las carreteras principales. Sin embargo, vemos un pueblo animado, con niños jugando en la calle, tal vez por ser fin de semana.
Aparcamos al lado del río y nos dedicamos a callejear. Muchas casas están restauradas y parece que se usan como segunda residencia. Las calles suben empinadas y la arquitectura típica de la sierra está presente en sus casas de piedra, varias de ellas presentan blasones heráldicos en las fachadas.
El pueblo se encaja en un paisaje abrupto trepando por la ladera. Resulta llamativa la Torre del Reloj, visible desde todas partes, ya que se sitúa sobre un peñasco puntiagudo. También sorprendente es el emplazamiento de la Iglesia de San Pedro y San Pablo, alzada sobre un promontorio en la parte más alta del pueblo, como si fuera más bien una fortaleza que una iglesia.
Más información: https://www.ventrosa.net/
Ventrosa de la Sierra, una de las Siete Villas del Alto Najerilla en La Rioja
Viniegra de Abajo
Se localiza a sólo 3 Km de Venta de Goyo, subiendo una estrecha y sinuosa carretera por el desfiladero del río Urbión. El río Urbión nace en la Sierra de la Demanda, exactamente en la Laguna Urbión que se emplaza en la falda del Pico Urbión. El río Urbión es afluente del Najerilla y atraviesa Viniegra de Abajo creando preciosos parajes. Sobre el río se alzan los dos arcos de piedra del Puente Canto así como el Puente del Lavadero.
En tan bucólica localización se sitúa este pueblo de calles empedradas, donde se juntan casas de indianos con las tradicionales de los ganaderos.
Viniegra de Abajo tiene siglos de historia a sus espaldas, pues ya estaba habitado en época romana. Además fue el lugar donde se constituyó la Confederación de las Cinco Villas y Valle de Canales.
Algunos de los habitantes de Viniegra de Abajo se embarcaron a América para probar suerte a mediados del siglo XIX, a Argentina, Chile, Cuba. Triunfaron como empresarios y emplearon su fortuna en construir lujosas mansiones en su villa natal, Viniegra, a principios del siglo XX, todas con nombre propio: Casa Montero, Villa Emilia, Casa Manzanares…… Estas grandes casas de indianos se extienden a lo largo de la carretera.
Un emigrante fue el benefactor del edificio de la antigua escuela, construido en 1908 en piedra de la zona.
En cambio, las casas más humildes de ganaderos se apiñan en torno a los huertos. Son casas de piedra rojiza obtenida del entorno, con alto contenido en hierro.
El lavadero cubierto es una maravilla, junto a la fuente de los cuatro caños. Se alimenta de un manantial que mantiene temperatura constante a lo largo de todo el año. El agua fluye por todo el pueblo: lavaderos, fuentes, canales de agua.
Más información: https://lasviniegras.es/
Lavadero de Viniegra de Abajo
Fuente de los cuatro caños en Viniegra de Abajo
Casas de ganaderos de Vidriera de Abajo
Escuela de Viniegra de Abajo
Casas de indianos en Viniegra de Abajo
Viniegra de Arriba
Unos 10 Km lo separan de Viniegra de Abajo. Sin embargo, parece mucha más distancia. La carretera se retuerce atravesando el estrecho desfiladero del río Urbión, de paredes rocosas y colores otoñales. El río desciende joven y fresco desde la Laguna Urbión, formando parajes de gran belleza.
Siguiente el curso del río es posible llegar a pie a la laguna Urbión mediante una ruta senderista bastante larga (4 horas desde la carretera).
Al igual que Viniegra de Abajo, Viniegra de Arriba también es uno de los pueblos más bonitos de España. Aquí también rebosa el agua en fuentes y lavaderos. Son dos ríos los que riegan el pueblo: Castejón y Ormazal. Las condiciones climáticas son rigurosas en invierno, ya que casi alcanza 1200 m de altitud.
Sus calles empedradas y empinadas con canalillo en medio para que circule el agua son encantadoras.
El ganado es su modo de vida, y curiosamente, este pueblo todavía mantiene la trashumancia. La arquitectura tradicional se manifiesta en casas de piedra roja, callejuelas de cantos rodados, por las que paseamos para llegar a la Plaza Mayor, iglesia de la Asunción, lavadero, fuente de los tres caños, paseo fluvial.
Más información: http://www.viniegradearriba.org/
Viniegra de Arriba
Brieva de Cameros
Este pueblo completa el conjunto de las Siete Villas del Alto Najerilla. No tuvimos ocasión de visitarlo, ya que quedaba a desmano de nuestro itinerario, pero se puede consultar más información: http://www.brieva.org/
Alojamiento
Venta de Goyo. Habitaciones sencillas, pero están bien y las camas son cómodas. El emplazamiento es estupendo, al lado del río en un frondoso entorno arbolado. El desayuno es poco destacable: café con leche, zumo natural, tostadas, bizcocho, magdalenas. El personal nos trató muy bien, muy atento y cercano.
El restaurante es bueno, se come muy bien. Crepes de hongos (riquísimo), cordero Goyo, jabalí estofado en salsa. Todo muy bien cocinado y muy buen precio. Un sitio con solera, muy conocido y recomendable. Es un referente en la zona.