El Trilho do sobreiral da Ermida es una de las rutas de senderismo señalizadas del Parque Nacional Peneda Gerés, PR-14, concretamente en el área del Valle del Gerés y Serra do Gerés. Se trata de una ruta circular muy bonita, que recorre diversos entornos, ya que transcurre por diferentes altitudes.
Localización de la ruta
Oficialmente, el Trilho do Sobreiral da Ermida comienza en la aldea de Ermida. Nosotros lo iniciamos en el Miradouro de Rocas, cerca de la Cascata do Arado. Hasta allí llegamos desde Vila do Gerés tomando la carretera hacia Portela do Homem, y en Vidoedo cogemos la desviación al Miradouro Pedra Bela y Cascata do Arado. Estamos en el Valle do Gerés, dentro del Parque Nacional Peneda Gerés, al norte de Portugal. Al Valle del Gerés se accede por la frontera de Portela do Homem desde Ourense-Lobios.
Aparcamos junto el Mirador de Rocas, donde finaliza el asfalto y continúa la pista de tierra a la Cascata do Arado.
Coordenadas GPS del Miradouro das Rocas: 41.7154056,-8.1310572,15
Descripción de la ruta
- Distancia: 15 Km
- Tiempo estimado: 5 horas
- Circular
Las zonas altas de la Serra do Gerés se caracterizan por su configuración rocosa destacando los penedos graníticos. A altitudes medias y bajas crecen árboles o se asientan aldeas tradicionales entre campos agrícolas. En esta ruta recorremos un sobreiral, pasamos por varios miradores y varios currales, por la aldea de Ermida y por la Cascata do Arado, tal vez la más visitada del Parque Nacional Peneda Gerés.
Aunque la ruta acumula un desnivel total de unos 600 m de subida y de bajada, es fácil de caminar, puesto que transita por pistas de tierra o caminos anchos.
El Miradouro de Rocas, punto de inicio de nuestra ruta, se alza sobre un peñasco al que subimos por un sendero muy pendiente. Las vistas son excelentes desde este mirador, ya que a un lado divisamos el monte pedregoso por el que se descuelga el regato do Arado, y al otro lado las verdes laderas en las que se enclavan aldeas, y mucho, mucho bosque.
Nuestro primer destino es la Cascata do Arado, e iniciamos la marcha por la pista de tierra que acompaña el curso del regato Arado, en cuyas pozas se refrescaban unos cuantos portugueses. Unos altos escalones nos llevan al mirador sobre la cascada. Es un bonito espectáculo contemplar la caída de agua resbalando por las rocas onduladas. Y el color azulado de la poza le aporta una dosis de belleza.
Proseguimos la caminata por la pista y a escasa distancia nos topamos con otro mirador natural hacia el valle agreste del Arado. Aquí finaliza la autorización para circular con vehículos y no se puede seguir en coche.
Pasamos por varios currales en el siguiente tramo. En el Curral da Malhadoura, la casa del pastor se incrusta literalmente en la roca. En el Curral dos Portos han restaurado la cabaña para uso recreativo y celebraban una comida familiar.
Recorremos después una zona de penedos graníticos, tratando de reconocer las más diversas figuras. Uno nos recuerda al Bico do Patelo de Castro Laboreiro. Y muy cerca nos asomamos a un punto panorámico que nos obsequia con formidables vistas al valle del río Cádavo, encajonado entre laderas. Distinguimos a lo lejos la aldea de Ermida, a donde nos dirigiremos, aunque todavía faltan varios kilómetros. En el fondo del valle reluce el verde brillante de las parcelas de cultivo.
Comienza entonces un descenso pronunciado por la pista de tierra que describe zigzags. Las primeras sobreiras (alcornoques) comienzan a hacer acto de presencia al adentrarnos en el Sobreiral da Ermida. Son ejemplares enormes, cuyo entramado de ramas compone auténticas esculturas vegetales. Cada vez abundan más conforme descendemos, aunque nunca llega a existir un bosque exclusivo de sobreiras, sino que siempre conviven con otras especies de árboles.
El descenso prosigue hasta alcanzar la carretera por la cual continuamos hasta tomar un camino de tierra que asciende por el bosque. Es después de cruzar un riachuelo cuando el ascenso se vuelve más empinado hasta que nos concedemos un descanso al llegar a la aldea de Ermida.
El Mirador de Ermida me encanta. Lo pillamos en un momento ideal con el sol iluminando las verdes parcelas y los viñedos que crecen en la pendiente ladera mientas el cielo luce un combinado de nubes muy favorecedor. Al fondo asoma el monte rocoso que hemos recorrido y al oeste las montañas de Terras de Bouro y sus aldeas. Hasta aquí se puede llegar en coche. Aprovechamos para comer el bocata y lo bueno es que hay bar, por lo que nos regalamos unas bebidas y unos helados de postre.
Estamos tan a gusto en la terraza del bar, pero debemos espabilar porque todavía nos quedan 2 Km y medio de caminata hasta el coche, y en subida. Otro mirador sobre un peñasco nos encontramos en este tramo, al que sólo se llega a pie y por tanto estaba solitario. Siguiendo nuestros pasos, de nuevo nos acercamos al monte rocoso, lo cual ya es un aviso de que estamos cerca del coche, al cual llegamos tras recorrer algo más de 14 Km en este Trilho do Sobreiral da Ermida do Gerés que me ha gustado mucho.
Fotos del Trilho do Sobreiral da Ermida do Gerés, PR-14
Cascata do Arado
Miradouro do Arado
Trilho Sobreiral da Ermida do Gerés
Curral da Malhadoura
Curral dos Portos
Trilho Sobreiral da Ermida do Gerés
Sobreiral da Ermida en Serra do Gerés
Mirador natural al valle del río Cádavo
Aldeas del Gerés
Trilho do Sobreiral da Ermida do Gerés, PR-14
Sobreiral da Ermida do Gerés
Vistas durante el trilho do sobreiral da Ermida do Gerés
PR-14 Parque Nacional Peneda Gerés
Hórreo en la aldea de Ermida do Gerés
Aldea de Ermida do Gerés
Miradouro de Ermida
Trilho do Sobreiral da Ermida do Gerés
Miradouro das Rocas
Track de la ruta Sobreiral da Ermida
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