La Mina da Toca se ubica en la Sierra del Courel a 1000 m de altura sobre el valle del río Lor y llegamos hasta ella tras una corta caminata. Estamos en una explotación de oro construida por los romanos, al igual que otras minas cercanas, como Touribio (este y oeste), Millares y Monte Barreiro.
La mina se emplaza en una ladera entre 750 y 1020 m de altitud. Su principal característica es que se conservan todavía las estructuras usadas por los romanos, que extraían el agua en depósitos y la introducían en tromba en los túneles y galerías que habían excavado en la montaña. El agua agrietaba el terreno provocando su desplome. La roca se arrastraba a canales de lavado para recoger el mineral que se entremezclaba en filones de cuarzo.
Cómo llegar a la Mina da Toca en O Courel
La forma más fácil y cómoda de llegar es coger la carretera de Seoane do Courel a Samos y al poco tiempo, cerca de Meiraos, desviarse por una pista asfaltada que parte a la derecha, que está señalizada a la Mina da Toca. Después arranca una pista de tierra a la derecha, donde empezamos a caminar. En 4×4 se podría seguir, pero no sé si está permitido. En cualquier caso, merece la pena el paseo de 6,5 Km (ida y vuelta), ya que es muy cómodo y panorámico.
Avanzamos por la pista de tierra casi llana con vistas estupendas al valle del Lor y a sus montes: Formigueiros, Teso das Papoulas, Pía Páxaro.
Tras algo más de 1 Km empezamos a ver el monte que aloja la antigua explotación de oro. Vamos viendo las aldeas asentadas en las laderas, con sus tejados de pizarra negra en el verde paisaje de bosques y praderas.
A lo lejos se ve la Mina da Toca
Un mirador se sitúa encima de la mina, desde el que divisamos el valle del Lor. Cuenta con un panel informativo.
Mirador de la Mina da Toca
Después bajamos a la pared rocosa donde fue excavada la mina, pero no vemos factible acercarnos porque está cerrado de vegetación. El paredón rocoso cae vertical en colores amarillos y rojizos.
Alrededores de la Mina da Toca
Pared de la Mina da Toca, mina romana en el Courel
Encontramos una boca de acceso a las galerías, pero es tan reducida que no me parece prudente entrar. Aunque dicen que se conservan las estructuras romanas, no conseguimos ver nada.
Regresamos por el mismo camino disfrutando del paisaje.
Otra opción para llegar a la mina consiste en seguir un sendero que parte de la aldea de Piñeira, en ese caso supone casi 300 m de desnivel.
Track de la ruta